Por Salif Luna | Médico Cirujano, UNAM
Esta reunión fue muy especial para todos nosotros. Si bien se venía planeando desde mucho antes, el haber logrado materializarla significó mucho. La sorpresa llegó un día antes, cuando nos avisaron quiénes serían los ExFLAGS que estarían con nosotros. La dinámica consistiría en grupos uno a uno o grupos de máximo tres personas, conversando con ExFLAGs que ya tienen carreras profesionales consolidadas.
Iniciamos a las 11:00 del sábado 23 de noviembre. La cita fue de forma virtual. Desde que ingresamos a la sala, ya podíamos ver a muchas personas, algunas a quienes no conocíamos, pero se notaba la emoción por conocernos y por reencontrarse con amigos que habían hecho en la Fundación. Inclusive, empezaron a contar brevemente cómo algunos se habían conocido y en qué generación.
Todos comenzamos presentándonos, comentando qué estábamos o habíamos estudiado, dónde vivíamos actualmente y algún dato curioso acerca de nosotros. Esto nos ayudó a darnos cuenta de la diversidad que estábamos viviendo en ese momento. Posteriormente, cada grupo se dividió en una sala para comenzar a platicar con sus mentores.
Todos coincidimos en que fue una experiencia bastante emocionante, algo cercano a platicar con nosotros, pero desde el futuro, ya que en ocasiones coincidimos en las mismas licenciaturas e incluso en áreas de interés. Algo que también nos ayudó y dio tranquilidad fue haber hablado de temas más relacionados con nuestro desarrollo en la vida personal y la importancia de también considerar este tipo de decisiones.
Al final, tanto mentores como FLAGs y ExFLAGs compartimos nuestra experiencia, lo que nos enriqueció e incluso permitió generar lazos que tal vez en el futuro, diferentes generaciones de becarios podrían aprovechar para ayudarse mutuamente. Al final todos llegamos a la conclusión de que, gracias a la FLAG, hemos podido obtener diversas y únicas oportunidades en la vida.